EL PAN DE ESTE DÍA. Juan 3:22 al 30. “Después de esto, vino
Jesús con sus discípulos a la tierra de Judea, y estuvo allí con ellos, y
bautizaba”. Testimonio
Juan Bautista es un predicador que conoce las reglas, él no
viene a fundar un movimiento sino a hacer una presentación de su Señor. Él
indica al pueblo un nuevo rumbo, sabe quien viene detrás de Él, Marcos 1:7, “Y
predicaba, diciendo: Viene tras mí el que es más poderoso que yo, a quien no
soy digno de desatar encorvado la correa de su calzado”. Por ello Jesús,
después de haber recibido el bautismo de Juan, da el paso de crear el
movimiento de la buena nueva. Llegó a bautizar a la gente en el río Jordán al
mismo tiempo que Juan Bautista. Ambos atraían a la gente de Palestina,
anunciando la llegada del Reino de Dios.
Sin embargo se genera lo popular de los seres humanos, la
envidia que arroja intriga, pues “Juan bautizaba también …, y venían, y eran
bautizados. Entonces hubo discusión entre los discípulos de Juan y los judíos
acerca de la purificación. Y vinieron a Juan y le dijeron: Rabí, mira que el
que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien tú diste testimonio,
bautiza, y todos vienen a él”. La respuesta de Juan a sus discípulos es una manera
de mostrar su carácter y madurez, y descubre la grandeza de su alma. “Respondió Juan y dijo: No puede el hombre recibir nada, si
no le fuere dado del cielo.”
Juan no se puso a chismear, ni apoderarse del rebaño, ni
tampoco armó sus discípulos contra Jesús, él da a sus discípulos la manera de
ver las cosas con más objetividad. Se sirvió de cuatro argumentos importantes 1º). Pierdan cuidado con Él. Dios no ha
perdido ni el poder ni el control, nada se escapa de Él, Sólo de Dios se recibe
aquello que le remite a Él. Si Jesús se populariza es porque Dios lo permite.
Debemos entender que sea bueno o malo todo proviene de Dios. Y no todo puede
ser para bien. Deuteronomio 13:3, no darás oído a las palabras de tal profeta,
ni al tal soñador de sueños; porque Jehová vuestro Dios os está probando, para
saber si amáis a Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda
vuestra alma”. Pero Él lo certifica.
2º). Juan vuelve a dar su testimonio que dio de Jesús y
afirma, que él, Juan, no es el Mesías. “Vosotros mismos me sois testigos de que
dije: Yo no soy el Cristo, sino que soy enviado delante de él”. Hoy es muy
corriente encontrar los… Marcos 13:22
… falsos Cristos y falsos profetas, y harán señales y
prodigios, para engañar, si fuese posible, aun a los escogidos”. Estos son
hombres inescrupulosos que sin ser los Cristo,
se presentan como tales, no para guiar el rebaño Jesucristo, sino a
misterios no revelados; cosas que los verdaderos Cristos hacen, pues son los
Santos en Él. Colosenses 1:27. a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas
de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la
esperanza de gloria,
3º). Juan utiliza una costumbre de los festejos en ocasión
de una boda. Pues en Palestina, en el día de bodas, la novia, se llenaba de
“amigos del novio” esperaban la llegada del novio para poder presentarlo a la
novia. En este caso, Jesús es el novio, el pueblo es la novia y Juan es el
amigo del novio. “El que tiene la esposa, es el esposo; mas el amigo del
esposo, que está a su lado y le oye, se goza grandemente de la voz del esposo;
así pues, este mi gozo está cumplido”. Juan da a entender plenamente que Jesús
es el novio y pudo presentarlo a la novia, a la gente. En ese momento la novia,
la gente que ha de creer, debe dejar al amigo del novio e irse detrás de Él. Para
Juan era de “alegría completa”. Ya no quiere nada para sí, sólo el gozo de
cumplir con su misión
4º). Llego la hora de mi retirada, Juan nunca se apoderó del
rebaño, su gozo siempre fue el de presentar al maestro, como el destino final
de la gente: La frase final lo resume todo: "Es necesario que él crezca y
que yo disminuya." Esto también es aplicable a cada organización, y cada
individuó, Permitir que Jesucristo crezca y todos vayan a Él, así nuestros
edificios un día queden Solos.